martes, 23 de mayo de 2017

Tränen der Sehnsucht: ¿uno o dos?

Originalmente publicado en Globedia.

Quien haya escuchado el tema «Tränen der Sehnsucht (Part I & II)» de Lacrimosa puede haber notado que, en paréntesis, se alude a la existencia de dos secciones. La pista en el disco Einsamkeit (1992) es una sola, de modo que parece un tanto confusa la referencia a dos partes de una canción que no había aparecido separadamente antes (ni lo ha hecho después). La única forma de proponer algún límite que dimidie el tema es escuchándolo.



Imagen: Taringa!

Una audición superficial nos conllevará a proponer la división más evidente: el tema comienza con una pieza de piano, voz que — pasando a segundo plano en ocasiones — predomina durante una gran parte de la pista: casi ocho minutos en medida ordinaria. Después de esto, el piano es intercambiado por una guitarra eléctrica quizá demasiado lacrimógena y el tema concluye con el sonido de un solemne órgano. Así obtenemos, por lo tanto, un punto concreto de división para el tema en dos partes. La primera corresponde al predominio del piano y la segunda, al predominio de instrumentos eléctricos liderados por la guitarra.

No obstante, esta no es la única división posible. En efecto, la letra nos conlleva a demarcar otra posible división. Al principio de la canción, el cantante nos habla acerca de un niño preso de la desesperación, rendido a causa de un trasfondo doloroso, pero incapaz de expresar su dolor más que con lágrimas a causa del mutismo: «und war längst taub?» — ¿y desde cuándo era mudo? Pero, luego de un breve silencio hacia la mitad del tema (con el piano dirigiendo la melodía en general), el cantante se mueve desde la tristeza y la voz del niño hacia su capacidad de apreciación estética y sus ojos, revelándonos una discapacidad de estos que es rematada con un hecho fortuito y luctuoso. Tal discapacidad había sido anunciada anteriormente, de modo que la sección siguiente se concentra en el hecho lamentable, anunciando un nuevo amanecer que, penosamente, no llega para el niño acerca del cual se canta. «Der Morgen tagte nicht für das Kind» — la mañana no llegó para el niño. El cantante menciona que las manos del niño permanecieron intactas para recordarnos que él, el benjamín de la Noche, era «ein Traum der Augen — nicht der Hände» — un sueño de los ojos; no de las manos: y ahora su existencia entera parece carecer de sentido. De modo que aquí encontramos otra posible división del tema en una primera y segunda parte.

Seguramente podrá alegarse que todas las canciones — o una gran mayoría — contienen una separación y una relación entre su aspecto musical y su aspecto textual. Pero esta relación no se evidencia en todos los casos. «Tränen der Sehnsucht» es un ejemplo de una canción donde tal relación se ha hecho evidente. La mención de dos partes nos conlleva a distinguir que, en efecto, hay dos secciones en el plano musical y también dos secciones en el plano textual. Ellas no coinciden cronológicamente. Aun cuando lo hicieran, el conjunto de factores nos conduce a explicitar la separación y la relación de la dimensión musical y la textual: he aquí, otra vez, dos partes para este tema.

El tema sigue siendo uno: con un título, una pista de audio y una continuidad tanto musical cuanto textual evidente. Hay, por cierto, dos líneas demarcadas sobre su cuerpo, pero la unidad de él sigue apareciendo con claridad a la vista. Las secciones están demarcadas sin ambages y el título en el álbum es una pista relevante para notarlo más fácilmente: «Part I & II» dice. Dos secciones musicales, dos secciones textuales y, por supuesto, dos dimensiones expresivas en un mismo cuerpo artístico.